Francisco Varatojo era uno de los profesores de macrobiótica más reconocidos a nivel internacional.
El 6 de julio de 2017, un grupo de amigos con los que bucea durante toda la mañana nota su ausencia tras volver a la embarcación. Inmediatamente, y sospechando que algún accidente podría haber ocurrido, vuelven a sumergirse, pero no lo encuentran. Dan el aviso a las autoridades. La policía marítima lo busca hasta dar con su cuerpo un día y medio después. Aún se desconocen las causas de su fallecimiento.
Francisco Varatojo no dejaba indiferente a nadie. Tenía un carisma intenso que le hacía muy buen profesor. Esa forma dinámica y divertida de exponer sus enseñanzas era una enseñanza en sí misma. La macrobiótica brillaba en sus clases. Disfruté de ellas en mi formación de 4º nivel en el Instituto Macrobiótico de España.
Cuenta en su libro, Macrobiótica, la revolución sana, que con 16 años descubrió la macrobióbiotica de la mano de un compañero del equipo de atletismo. Leyó un libro, después otro, e inició la práctica macrobiótica.
La práctica le llevó a experimentar “alteraciones a nivel físico y mental extraordinarias, casi imposibles de describir”. Dormía pocas horas y nunca se sentía cansado, su agudeza mental era extraordinaria, su disposición emocional embriagadora y, por encima de todo, tenía una indescriptible sensación de plenitud y de unión con todo lo que le rodeaba.
Esta experiencia le marcó tanto que decidió estudiar macrobiótica en profundidad. Fue a Boston, donde estudio con los Kushi; año 1979. Vivió en una study house, una casa de estudio en la que tomaban 3 comidas macrobióticas al día, se cocinaba y se estudiaba.
A su vuelta en Portugal fundó, junto con su mujer Eugenia, el Instituto Kushi de Portugal; año 1985; que actualmente se denomina Instituto Macrobiótico de Portugal. Además de la actividad docente que impartía en el Instituto, Varatojo también contribuyó al mundo de la enseñanza macrobiótica con:
- Conferencias en congresos y otros eventos
- Clases de programas formativos de diferentes escuelas
- Consultas individuales
- Artículos en períodicos y revistas
- Colaboraciones en restaurantes y tiendas
- Participaciones en programas de televisión
- Libros
- Otros proyectos sociales
Con la muerte de Francisco Varatojo la macrobiótica de Michio Kushi sufre un duro revés, dada su intensa labor divulgativa y didáctica.
Qué pena y que gran pesar causa esta noticia. Un dolor muy hondo en el corazón. Om namha Shivaya.
“Dicen que tengo que perecer, como las flores que planté perecerán
De mi nombre, nada quedará?
De mi fama, nadie recordará?
Pero los árboles que planté son fuertes y crecerán
Y las canciones que canté, cantándose seguirán”
Nezahualcóyotltzin
Gracias por tus comentarios, y gracias por esos versos tan bonitos.
Nunca tu ausencia causará el olvido