Empezaremos diciendo que el ser humano puede adaptarse a cualquier horario y lugar. Por esa razón, somos la especie que ha poblado todo el planeta. Esa capacidad de adaptación tiene su cara y su cruz. Por un lado, nos ayuda a sobrevivir, nos sintoniza con el entorno, somos uno con él y de ahí surge una experiencia de bienestar. Por otro lado, puede que nos acostumbremos a lo que no nos conviene, y … en ese caso… ¿Cómo saber lo que nos conviene si el hecho de acostumbrarse ya implica estar a gusto con aquello a lo que nos hemos acostumbrado?
Eso mismo me pregunté después de unos meses de seguir las recomendaciones de un consultor macrobiótico. “Vale, ya está, me he acostumbrado al arroz integral, las legumbres, veruduras, etc., etc. ¿Ahora qué?” Y a continuación me pregunté: “¿Existe algo aparte del bienestar del “acostumbramiento”?” Después de unos momentos comprobación pude responder. Sí, la diferencia estaba en los frutos. Me sentía mucho más vital, los árboles brillaban más y la vida tenía sentido por sí misma. Todo eso no existía con el anterior “acostumbramiento”, pero sí con este, con el del arroz integral, las verduras, el ejercicio diario, el dormir regular…
Todo esto me hace sospechar que existe un estilo de vida natural. Sí, es verdad, podemos adaptarnos a todo, diseñar la forma de vida que nos plazca, pero no podemos olvidar que alguien ya lo diseñó por nosotros, pero al mismo tiempo nos dio la libertad de poder cambiarlo a nuestro antojo, y eso lo hizo porque sabía que amar significaba dar libertad.
¿Cuál es esa forma de vida natural? Aquella que pone a todas las fuerzas del planeta a trabajar a nuestro favor. Para concretar y poder sacar algo práctico de estas reflexiones miremos qué pasa a lo largo de un día, cómo distribuimos nuestras actividades. Existen unos momentos en los que el cuerpo está diciéndonos: “¡Vamos, vamos, hazlo porque estoy preparado!” Y el ejemplo más sencillo que se me ocurre es el dormir. Al llegar la noche sólo hemos de dejarnos llevar. Existen más indicadores que nos aconsejan hacer ciertas cosas en determinados momentos.
El seguir un ritmo natural, junto con una dieta macrobiótica, nos puede ayudar a recuperar la salud y a prevenir enfermedades. A este respecto, el terapeuta Andreas Moritz, sugiere en su libro “Los secretos eternos de la salud. Medicina de vanguardia para el siglo XXI” una rutina diaria ideal. A continuación la resumo:
MAÑANA
- Levantarse pronto (antes de la salida del Sol). Para ello, como veremos al final, uno tiene que acostarse temprano
- Lavarse los dientes, raspar y limpiar la lengua
- Beber un vaso de agua tibia
- Beber un vaso de agua con limón y miel
- Evacuar el intestino y la vegija
- Cepillarse el cuerpo en seco. En macrobiótica te recomendamos utilizar una esponja de calabaza o un crin. En seco la exfoliación de la piel es más eficaz. Después con la ducha eliminamos los restos de células muertas.
- Tomar un baño o ducha de agua caliente, seguido de una breve ducha de agua fría
- Hacer ejercicio
- Meditar
- Tomar un desayuno ligero antes de las 8 am
- Trabajo o estudio
Diréis que son muchas cosas; estoy de acuerdo. Andreas Moritz incorpora en esta rutina conocimientos que posee sobre la salud y sobre tradiciones como la Ayurveda. Para empezar, nosotros podemos tener en cuenta que, tras levantarnos pronto, lo ideal sería: lavarnos, hidratarnos, evacuar, hacer ejercicio, calmar la mente, desayunar y trabajar. Veamos que dice respecto a la tarde y la noche.
TARDE
- Almorzar entre las 12 y 13 horas
- Tomar un breve descanso después de comer, seguido de un paseo de 10-15 minutos
- Trabajo o estudio
- Ejercicio
- Meditar
NOCHE
- Cena ligera entre las 18 y 19 horas
- Breve paseo de 10 a 15 minutos
- Actividad agradable
- Acostarse temprano, antes de las 22 horas
Lo que más destaca, si tenemos en cuenta que vivimos en España, es el horario de las comidas. Hay una tendencia natural del cuerpo para encontrarse preparado para comer a esas horas (12 y 18h), ya que a esas horas es cuando mayor cantidad de enzimas digestivos tenemos listos para entrar en acción. Al mismo tiempo, el aparato digestivo pierde fuerza por la noche, por lo que no conviene cenar tarde. En cuanto al ejercicio, la región mediterránea nos ofrece un clima y unos parajes que facilitan mucho que lo llevemos a cabo, especialmente en verano. Podemos pasear por la playa, pasar una tarde en el campo, hacer ciclismo, nadar, etc. Y sobre la meditación, decir que no es necesario sentarse con las piernas cruzadas, ojos cerrados y semblante serio, sino que será suficiente con dedicar unos minutos al día a mirarnos a nosotros mismos y decir “¡Uy! Estoy respirando, mejor dicho, la respiración ocurre… entra, sale, entra…”, “¡Eh! Un pensamiento, y otro…”. Así unos minutos, y comprobaremos como la calma del observar aterriza en nosotros.
Hasta aquí han sido unas pocas sugerencias para sincronizar nuestras vidas con los relojes de las plantas, del sol, la tierra, el mar y el resto de seres con los que compartimos esta vida. Como se suele decir en las películas de acción para que los planes salgan bien: ¡Sincronicemos nuestros relojes!
Hola Mario,
Soy una mujer de 32años.mido 1,71cm y peso35kg.llevo así 5años.he consultado varios especialistas,tratamientos y hospitales.lo único que me funciono es macrobiótica,yoga y meditación.
Ya he adaptado mi rutina a la naturaleza.trabajo con afirmaciones positivas,visualizaciones,oración y gratitud.Todo funciona a la perfección!!me sieto mas alegre vital,gano peso.estoy optimista,gano fuerza,mejoro postura corporal,respiración.estoy mas serena y estable emocionalmente…y siempre hay algo q desestabiliza y vuelve la rueda!!
Me paso de ejercicio o actividad física,me euforizo…o me paso con pranayamas,me tenso,me olvido de verduras(por cereal,proteínas y grasas,q son mas nutritivos y hacen ganar peso).o me paso con algas y casi me quedo sin potasio…ya me ha pasado de todo.empiezo con muchas terapias o técnicas.cantar mantras para sacar energía y transmutar…y al no tener sensación de hambre,sed,sueño..me salto la savasana,duermo menos o no incremento mas comida cuando el metabolismo se aumenta o por contrario comida muy yang me tensa,activa…y al final cuerpo no resiste.No se como encontrar y mantenerme en equilibrio(pq todo cambia,pero no se cuando,ni como,pq ya no percibo como antes esa voz interior,intuición q me orientaba).quiero volver desesperadamente a ese estado de equilibrio,serenidad y bienestar…pero casi lo rozo unos minutos al día!!
Leyendo a kushi, osawa..he decidido hacer dieta 7y hoy empiezo la6(lo q serian ahora la 1-2).tu q crees?me pueden debilitar en este momento?aun haciendo solo crema de arroz y gomasio,mis deposiciones son muy blandas(pastosas,diarreicas y con moco).
He dejado los suplementos de oagra,DHA,pianto,Dell oxygen plus,vit.grupo B,minerales:Ca,Mg,Zn…y proteínas…
No se si es sensato?
He dejado casi de moverme y solo algún estiramiento…lo único q he conseguido es perder toda musculatura y fuerza q tenia(ultimo 1,5kg).
Tu q crees?que me puedes aconsejar?
Gracias
Hola Mapu:
Por lo que me cuentas tienes una fuerte tendencia a no-estar en la tierra. En términos macrobióticos podríamos decir una fuerte tendencia Yin. Tu extrema delgadez (un IMC de 11.97) y el gusto por lo meditativo, intuitivo e incluso tu tendencia a la macrobiótica también lo indican. En tu caso yo intentaría compensar esa tendencia con cosas que contribuyesen a que estuvieses más en la tierra. Te pongo algunos ejemplos:
– Dieta macrobiótica, dándole más importancia a las verduras de raíz, al pescado (sobre todo azul), legumbres, los frutos secos, aceite de oliva extra virgen, carne criada de forma natural, huevos biológicos… son alimentos que te van a ayudar a tener energía y a “construir” el cuerpo. No te recomiendo en tu caso tipos de dieta como la 7 o la 6, creo que puede debilitarte. Yo seguiría con los suplementos.
– Ejercicio físico, tipo entrenamiento de fuerza en gimnasio, adaptando la intensidad a tu nivel actual. El yoga o la carrera te las recomendaría menos.
– Poca meditación y más atención a las cuentas y a los negocios (asuntos de la tierra). Además te centrarán porque te obligan a tener constancia y regularidad.
– Comer cada 3 horas, sin saltártelo (siempre y cuando tengas hambre).
– Tomar el sol, estar en contacto con la naturaleza y dormir a horarios regulares también te puede ayudar.
Un saludo
Hola Mario,
Perdona,no había visto tu respuesta.
Te lo agradezco mucho.
Estoy muy yin,pero siempre es resultado de mi perfeccionismo,autoexigencia…wue me acaban por desgastar.al cabo de tiempo,me he dado cuenta que si hago una dieta muy yang,me tenso,cojo rigidez,me vuelvo hiperactiva,luego tensa,critica y rígida…y eso acaba por de imitarme de nuevo…es como un circulo,el extremo yang,me lleva de nuevo al yin…ahora estreñimiento seco,con piel seca…pero edemas en pies,tobillos y piernas…me cuesta respirar por tensión zona delantera del cuerpo,con lo q tengo malas posturas…y sugiero mal…es como tener estomago lleno todo el rato..muchos gases…lo de comer cada 3horas,seria lo conveniente,pero ya te comento q no puedo…y las grasas,que tan bien me irían para ganar peso,no las tolero demasiado bien…si me paso aceite o semillas…luego no sugiero bien,tengo nauseas…el tema de pescado(no seria mejor blanco,por lo de toxicidad…ademas con estas digestiones…no creara putrefacción en intestinos?)
Se que son muchas cosas,pero es que no consigo remontar…
Te agradecería tu consejo y apoyo.
Gracias
Mapu, te aconsejaría que fueses a un profesional y que tratases de solucionar los problemas digestivos. Puedes visitar la página de la doctora Irina Matveikova y buscar allí opciones.
Un abrazo y cuídate!
Parece ser que las lecturas literarias están reñidas con la Macrobiótica. No se ven por ninguna parte…
Hola Antonio:
¿A qué te refieres con “lecturas literarias”?